¡Tu Eres Un Israelita!

Si eres descendiente de esclavos (Negros, Hispanos o Indios de América), la Biblia es tu libro de historia. Siendo Israelita o Judío no es una religión sino la herencia que hemos perdido. Por ejemplo, la Biblia describe a los Israelitas como una raza y pueblo de piel oscura. Cantar de los Cantares 1:5 Morena soy, oh hijas de Jerusalem, mas codiciable [hermosa]; como las cabañas de Cedar, como las tiendas de Salomón.”

¡Israelitas a través de las edades!

Jesucristo es un Israelita, quien también fue descrito en la Biblia como un hombre negro en Apocalipsis 1:13-15. Las imágenes de arriba muestran a nuestra gente en diferentes períodos de tiempo. La esclavitud que le ocurrió a nuestro pueblo fue predicho por Cristo. Véase, Lucas 21:24. Él también predijo nuestra salvación si regresamos a nuestra herencia. Juan 4:22 “Vosotros adoráis lo que no sabéis; nosotros adoramos lo que sabemos: porque la salud [salvación] viene de los Judíos.” Nuestra gente están atrapados en las religiones y no se dan cuenta de lo importante que es saber quiénes son. ¡Aprende de tu rica historia, de las promesas y de la gloria que te pertenece! Véase, Romanos 9:3-6. Las bendiciones nos esperan, cuando Cristo nos dice lo siguiente, Juan 1:47 “Jesús vió venir á sí á Natanael, y dijo de él: He aquí un verdadero Israelita, en el cual no hay engaño.” Obtenga más información en ¿Quiénes son los hijos de Israel?


¡Tu Eres Un Israelita!

Deuteronomio 30:19 “A los cielos y la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición: escoge pues la vida, porque vivas tú y tu simiente:”

Todos tenemos que tomar una decisión, que determinará nuestro destino para la eternidad. Dichos como “todos tenemos que morir” o “YOLO” son declaraciones engañosas de aquellos que son ignorantes. 1 Corintios 15:22 “Porque así como en Adam todos mueren, así también en Cristo todos serán vivificados.”

Es posible que no pienses en la eternidad, sin embargo, tus decisiones afectan si tienes la bendición o la maldición en tu vida. Como pueblo hemos visto a Dios cumplir sus profecías. Cuando obedecíamos a Dios, nuestro pueblo fue inmensamente bendecido y gobernó. Véase, Deuteronomio 28:1-14. Pero cuando desobedecimos, nos maldijo y nos puso en esclavitud. Véase, Deuteronomio 28:15-68.

De REY a ESCLAVO

Tenemos la opción de volver a ser reyes o sufrir la segunda muerte. Apocalipsis 21:8 “Mas á los temerosos é incrédulos, á los abominables y homicidas, á los fornicarios y hechiceros, y á los idólatras, y á todos los mentirosos, su parte será en el lago ardiendo con fuego y azufre, que es la muerte segunda.”


¡Tu Eres Un Israelita!

El arrepentimiento es una de las razones por las que es importante saber que eres Israelita. Hechos 5:31 “A éste ha Dios ensalzado con su diestra por Príncipe y Salvador, para dar á Israel arrepentimiento y remisión de pecados.”

¿Pero qué es el arrepentimiento? Salmos 7:11 “Dios es el que juzga al justo: y Dios está airado todos los días contra el impío.” El ser ignorantes de nuestra herencia nos ha hecho estar en pecado; haciendo el mal al quebrantar las leyes de Dios. Véase, 1 Juan 3:4. Se nos ha dado la oportunidad de pedir perdón, de ser perdonados y de cambiar. Esta oportunidad no se puede lograr en la religión. Como un cordero sacrificado, Cristo murió para pacificar la ira de Dios y dar a Israel arrepentimiento (los llamados Negros, Hispanos e Indios Americanos). ¿Quién no quisiera una segunda oportunidad en la vida para empezar de nuevo y hacer las cosas bien?

Pero debes ser sincero. Primero, en oración confiesa el pecado a Dios, pides que te perdone y no comete mas el pecado. De lo contrario, los que no se arrepientan serán juzgados conforme a las leyes. Hechos 17:30 “Empero Dios, habiendo disimulado los tiempos de esta ignorancia, ahora denuncia á todos los hombres en todos los lugares que se arrepientan:” Versículo 31: “Por cuanto ha establecido un día, en el cual ha de juzgar al mundo con justicia, por aquel varón al cual determinó; dando fe á todos con haberle levantado de los muertos.”


¡Tu Eres Un Israelita!

Dado que muchos han sido sumergidos, la creencia de que ya son salvos prevalece entre nuestra gente. Mateo 24:13 “Mas el que perseverare hasta el fin, éste será salvo.” Como aún no ha llegado el fin, están lejos de ser salvos. En cambio, lo que han ganado es estar mojados y ser miembros de una religión. El verdadero bautismo es en realidad el arrepentimiento. Hechos 13:24 “Predicando Juan delante de la faz de su venida el bautismo de arrepentimiento á todo el pueblo de Israel.”

Según la Biblia, ser bautizado en religión no tiene ningún efecto. Hechos 1:5 “Porque Juan á la verdad bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo no muchos días después de estos.” El agua de la llave que usaron no era agua de vida (salvación), no puede lavar los pecados. Véase, Isaías 12:3.

el bautismo confundido

El bautismo en Cristo es recibir el Espíritu Santo que viene por ser obediente a Dios. Hechos 5:32 “Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios á los que le obedecen.” Lo que se llama “lenguas” en las iglesias no es una manifestación del Espíritu Santo. Lenguas no es hablar galimatías o habla extática, sino la habilidad milagrosa de hablar otro lenguaje. Hechos 2:4 “Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron á hablar en otras lenguas, como el Espíritu les daba que hablasen.”Versículo 6: “Y hecho este estruendo, juntóse la multitud; y estaban confusos, porque cada uno les oía hablar su propia lengua.” Las lenguas extraña se describen como un idioma que otros podrían interpretar. 1 Corintios 14:27 “Si hablare alguno en lengua extraña, sea esto por dos, ó á lo más tres, y por turno; mas uno interprete.” Entonces, debemos preguntarnos, ¿qué espíritu hay en estas iglesias y cómo obtenemos la salvación?


¡Tu Eres Un Israelita!

Estas palabras se han vuelto extrañas a nuestro pueblo como la antigua escritura hebrea en que fue escrita, por el dedo de Dios. Éxodo 31:18 “Y dió á Moisés, como acabó de hablar con él en el monte de Sinaí, dos tablas del testimonio, tablas de piedra escritas con el dedo de Dios.” Dios habló estas palabras a todos nuestros antepasados para que creamos en sus palabras para siempre. Éxodo 20:1 “Y HABLÓ Dios todas estas palabras, diciendo:”

Los Diez Mandamientos

Lo que está escrito arriba es una versión abreviada de lo que escucharon en Éxodo capitulo 20. Para obtener el amor y la misericordia de Dios, los Diez Mandamientos son una buena fundación.


¡Tu Eres Un Israelita!

En las Iglesias se enseña que las leyes de Dios han sido abolidas por la fe. Romanos 3:31 “¿Luego deshacemos la ley por la fe? En ninguna manera; antes establecemos la ley.” Al contrario de lo que enseñan las Iglesias, la Biblia muestra que la fe se manifiesta por las obras de la ley. Véase, Santiago 2:14-26.

De hecho, el mismo Cristo nos dijo que ni siquiera imagináramos que las leyes serían eliminadas. Mateo 5:17 “No penséis que he venido para abrogar la ley ó los profetas: no he venido para abrogar, sino á cumplir.” ¿Por qué las iglesias nos están enseñando a ser desobedientes a Dios?

El libro de la ley, conocido hoy como la Biblia, fue dado a los hijos de Israel como herencia. Véase, Deuteronomio 29:29, Salmos 147:19-20, y Romanos 3:1. Las Iglesias no tienen aprecio por las leyes ya que nunca les perteneció. Tampoco entienden el propósito de las leyes o la venida de Cristo. Es como si un extranjero abriera tu correo y reclamando su dirección; tratando de interpretar los pensamientos íntimos expresados por sus seres queridos. Por eso le leen a nuestro pueblo pasajes difíciles para mantenerlos ciegos de la promesa del reino. Especialmente de las cartas de Pablo, que Pedro advirtió que no son para los ignorantes. Por favor lea, 2 Pedro 3:15-18.

Las leyes que Dios nos dio podrían arreglar los muchos problemas que sufrimos. Cristo vino a abolir el pecado que lleva a la muerte. Véase, 1 Juan 3:3-8 y Romanos 6:23. Cuando se le preguntó, ¿cómo podemos recibir la vida eterna? Cristo le enseñó al pueblo, las leyes. Lucas 10:25 “Y he aquí, un doctor de la ley se levantó, tentándole y diciendo: Maestro, ¿haciendo qué cosa poseeré la vida eterna?” Versículo 26: “Y él le dijo: ¿Qué está escrito en la ley? ¿cómo lees?”